viernes, 18 de diciembre de 2009

Diagnóstico: transtorno depresivo recurrente

Recuerdo lo que siempre me dice el psiquiatra cuando voy a consulta tras una recaída de las gordas. No voy sola, sola sería incapaz de ir. Voy arrastrada por la persona que más me quiere en el mundo y que más se preocupa por mi: mi madre . Cuento un poco el proceso y lo que siento: Entro cabizbaja, y me pregunta qué me pasa. Mi respuesta: No sé. Porque es la verdad, en esos momentos soy totalmente INCAPAZ de dar una respuesta coherente.Soy incapaz de expresarme. Y realmente no lo sé. Lo único que sé es que me siento insegura, no quiero (o no puedo) salir a la calle, me siento muy cohibida, y prácticamente sin sentimientos (quizás porque los inhibo). Eso ya lo sabe él.Intento hablar con la más seriedad posible, así contengo todas mis emociones y no lloro, cosa que evito a toda costa. Aunque él, al hablarme de lo que me pasa, me siento dolida y lloro por dentro, algo también se me debe notar por fuera.Pero aunque no se quiera, a veces no se puede evitar no llorar. Me contengo tanto porqué no sé que llegaría a pasar si exploto. No podría contenerme, me sentiría avergonzada de ponerme a llorar como una loca, y sé que podría estar bastante tiempo llorando. Lo sé porque me ha pasado. Total, después de lo poco que yo cuento, y lo que cuenta mi madre, llega el diagnóstico: DEPRESIÓN. Otra recaída. Yo le digo que no, que algo tendrá que ver mi forma de ser, mis miedos, mi inseguridad..para llegar a ese punto. Y él me dice que es una DEPRESIÓN ENDÓGENA, es decir, sin motivos externos, y que me va a curar. Por lo tanto me sube la medicación o me hace algún cambio. Yo estoy segura que no me va a hacer efecto. Me odio a mi misma. ¿Más medicación? - pienso - ¡Al final voy a tomar la farmacia entera!. Al final no voy a ser yo, solo algo parecido, no voy a sentir por mi misma. Además viendo que pasan las semanas y no mejoro reafirmo mi teoría, y vuelvo al psiquiatra cada tres semanas para que vaya valorando mi estado.
Todavía sigo pensando en esto. ¿Es realmente una depresión endógena? La verdad que no lo tengo seguro. Y si fuera una depresión endógena, la causa de que dure tanto... ¿sería la misma enfermedad, la manera de afrontarlo, la poca capacidad que tengo de aceptar que tengo una enfermedad?
Quería decir también que si no fuera por la paciencia de mi familia, especialmente mi madre, no sé que sería de mí. Aparte de que tomo las cosas con ella, siempre echas tu rabia a la persona de más confianza. Y sé que no lo merece. También me siento mal por esto, pero bueno. Ojalá llegue el día en el que pueda compensarle por todo este apoyo incondicional que recibo de su parte.
Nada más que decir, por ahora.

1 comentario:

  1. Tienes mucha suerte d que tu madre te apoye.Esto te va a ayudar en tu recuperación.Los psiquiatras estan equivocados, yo confiaba en la medicina tradicional, pero como no vas a tener nada que ver tu con lo que te ocurre? como vas a mejorar si tu no puedes hacer nada? Tu sabes que tienes mucho que hacer. Te recomiendo que busques alguien que te pueda orientar en este camino. La medicación puede ayudar pero no va a resolver lo que te ha llevado a este punto. Te lo digo por experiencia.Animoooosss!!!

    ResponderEliminar